La llegada de las Navidades significa un significativo repunte de la industria de las librerias, pues los libros considerados uno de los regalos estrella de estas fechas. De hecho, ciertos autores y editoriales se esperan precisamente a la llegada de las fechas navideñas para lanzar sus últimas novedades, sabiendo que su público no puede resistirse a la doble tentación: leer algo de sus autores favoritos, y quitarse de encima el marrón de escoger un regalo sabiendo que se acertará seguro con una buena lectura. Cada año las tendencias en cuanto a categorías lectoras van cambiando, siempre dependiendo del público y de sus apetencias. El por qué es una variable que no puede definirse a priori, aunque llegando al tercer trimestre del año ya se puede ir dislumbrando algo. Las principales categorías suelen ser siempre las relacionadas con la ficción, como son la literatura fantástica, de misterio y la romántica o erótica, sobre todo si el público es relativamente joven. Pero, ¿acaso la lectura es algo solo relacionado con la gente joven? Claro que no, y en los últimos tiempos, ha sido otro público diferente el que ha empezado a marcar diferencia: la tercera edad. Hasta hace unas décadas, nuestros abuelos…